Un descanso y un buen banquete en Cayo Menor ha servido para recargar las pilas de los concursantes. Ahora, han vuelto de nuevo a Cayo Paloma, su isla. Han encontrado su hogar totalmente destrozado debido a la tormenta, pero los supervivientes no han tardado en ponerse manos a la obra y volver a construir su anterior refugio.