Tras ganar el juego de recompensa, Suhaila, Lola, Rafa y Christopher disfrutan de su premio: una cama en la playa. "Lo que le faltaba a Rafa. Si no se levantaba antes de la cama, ahora con cama", dice Suhaila, que reconoce que lo que más echan de menos en la isla no es la cama sino la comida.