1 . Invéntate un nombre llamativo, extravagante, que llame la atención, como Abundio, Pantufla, Sandalio, Presenta ...o alguno de esos nombre y apellidos curiosos como Antonio Bragueta Suelta, Marta Marco Gol y otros de ese tipo. Da igual, cuando quieras contar la verdad ya se te habrá acabado la beca y asunto resuelto.
2. Di directamente que te llamas, La becariao El becarioy así te ahorrarás más de un disgusto. La nueva, o Eh,tú , también es válido.
3. Cágala desde el primer día . Mete la pata hasta el fondo en tu primer día de trabajo y lía una de las gordas, te aseguro que todos se acordarán de tu nombre para siempre. Y del de tu madre, también.
4 . Ponte un cartelito permanente con tu nombre (fosforito). Uno en la frente y otro en la espalda Queda un poco ridículo, pero es eficaz.
5 . Deja que cada uno te llame como le de la gana. Entre tanta confusión podrás librarte de más de una bronca.
6 . Contraataca. Llama a todos con nombres distintos. Viviéndolo en carne propia a lo mejor se solidarizan contigo.
7. Compórtate de un modo extraño, pon caras raras, ponte lo más feo de tu armario, lo que sea necesario para que hablen de ti. Ya se encargarán de aprenderse tu nombre para criticarte en cuanto te des la vuelta. 8.
8 .Llama a todos con tu nombre, a ver si pillan la indirecta.
Si sigues todos y cada uno de estos consejos y aún así continúas siendo el ignorado de tu empresa, vete, déjalo. Eres joven, becario, precario, pobre y tienes un futuro borroso pero la dignidad es lo primero. Claro que también puedes entrar en otra empresa y volver a empezar...¡Así es la vida del becario!.