Por fin estoy disfrutando de unos días de relax con la Toti en mi Málaga natal.
Estoy como me gusta estar, rodeado de gente que me quiere y a la que quiero. Los días entre semana se han convertido en los días de descanso. Solo temporalmente, porque sigo pretendiendo ir a clase en cuanto pueda, en cuanto vuelva a adquirir un poco de rutina.
Al contrario que otros años, el día de mi cumple no me invadió esa extraña sensación de soledad, esa sensación de que el tiempo se me escapa como el agua entre las manos. Los 20 años no ha sido mi mejor edad, no he disfrutado tanto como años atrás. Lo más positivo que he logrado con mi veintena ha sido entrar en la casa de Gran Hermano y conseguir llenar ese vacío que me ha acompañado durante bastante tiempo, ese vacío de amor, que no es poco pero que no compensan muchos momentos malos y dolorosos vividos este último año.
Espero que con 21 años pueda vivir nuevas aventuras y vivencias enriquecedoras. Tengo muy buenos presentimientos con respecto a esta nueva edad, espero no equivocarme al decir que me puedo estar enfrentando con la mejor etapa de mi vida. Viajes, amor, amistades, nuevos horizontes, diversión…
Tengo que comentar la intervención de Lauri en Ana Rosa. Me defendió a capa y espada de unas acusaciones muy graves y falsas. En anteriores post, ya hice mención a la encerrona protagonizada por una discoteca sevillana. Como era de esperar sacaron el tema y no contentos con eso, me acusaron de pasar la noche con una de aquellas go-gós. Menos mal que estuvo rápida en el quite la Parleña. Acusar sin pruebas es muy fácil. Yo me defiendo con testigos y con un billete de tren en Sevilla a las 8.30. Saliendo de la discoteca acompañado del manager a las 7 y calculando una hora de camino de mi hotel hasta Sevilla, las posibilidades de que esa chica que se fue de la discoteca cuando acabo su trabajo pasara la noche conmigo, son nulas. En fin una vez más intentan provocar una crisis entre Lauri y yo por medio de artimañas desleales. Parece que hay mucha gente interesada en que lo nuestro se acabe, ¿por qué no podemos ser felices juntos sin que nadie intente dañarnos? Creo que no le hacemos mal a nadie.
En nombre de Laura y en el mío, quiero agradecer los regalos que desinteresadamente nos han mandado a casa o nos lo han entregado en algún bolo. Esos detalles hacen que todo valga la pena, las horas de viaje y de soledad. Muchos de esos regalos y de esas cartas consiguen emocionarme. Es precioso leer los sentimientos que acciones tuyas despiertan en otras personas totalmente desconocidas. Es increíble descubrir que has formado parte de la vida de mucha gente durante los últimos 5 meses.
Siento haber tardado tanto en actualizar mi blog, ando liadísimo y ahora con la Toti en casa apenas me da tiempo a nada. Quiero exprimir al máximo su compañía.
Os animo a que escucheis canciones de mi cantante favorito. Kendo Kaponi.
Un beso a todos y 9000 veces gracias. Sin vosotros nada de esto sería posible.
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