La participante suele ir en pijama a recoger a su hija al cole, además es una gran amante de los estampados imposibles, pero lo que realmente quería con este cambio era parecerse a una secretaria sexy. Cristina ha conseguido que volviera a sonreír con este nuevo look y le ha puesto deberes en la pasarela, "el primer libro que te vas a leer va a ser el de Pelayo", le ha dicho.