Segunda derrota consecutiva en la era Zidane, el conjunto blanco cayó ante el Tottenham. Con el rostro serio, Cristiano pidió calma y aseguró que no están en crisis, pese a los desastrosos partidos de Liga y Champions. El portugués echa de menos en el equipo a los compañeros que abandonaron el club en el mercado de verano, afirmando que les hacían más fuertes.