Brasil e Inglaterra empatan (2-2) en el nuevo Maracaná

Una 'canarinha' muy motivada a dos semanas de jugar en casa la Copa Confederaciones salió a morder desde el primer minuto consciente del escaparate mundial del duelo. Era la primera vez que Inglaterra volvía al recién restaurado estadio de Maracaná desde 1984, cuando ambas escuadras se enfrentaron sobre ese césped con victoria visitante por 0-2.

En los primeros 45 minutos el más destacado fue Joe Hart que desbarató todos los intentos locales de inaugurar el marcador. El flamante fichaje del FC Barcelona, Neymar, fue la referencia en ataque de su equipo protagonizando llegadas de peligro sobre todo arrancando desde la izquierda.

EN LA SEGUNDA PARTE LLEGARON LOS GOLES.

Tras el descanso Brasil siguió a lo suyo, acercándose a la meta contraria y encerrando a Inglaterra en su área. Fruto de ese buen juego de ataque llegó el primer tanto del partido. Un disparo medido de Hernanes desde la frontal del área impactaba en el larguero y Fred aprovechaba el rechace para mandarla al fondo de la red.

A partir del tanto local el partido empezó a animarse. Inglaterra introdujo a Chamberlain en el terreno de juego y revolucionó el encuentro. Con mucha más movilidad en el ataque, el jugador del Arsenal sería el encargado de empatar el choque con un gol desde fuera del área.

Tras la igualada Inglaterra se echó atrás, a la espera de una contra para matar el partido. Esa contra llegaría después de un fallo de Marcelo cuando todo su equipo estaba volcado al ataque. Después de una rápida transición, Rooney recibió la pelota en la frontal y desde ahí sacó un zapatazo que tocó levemente en un defensa y se coló por toda la escuadra.

Brasil supo reaccionar a tiempo y poco después un buen centro de Lucas Moura encontró a Paulinho que conectó una volea sensacional para igualar de nuevo la contienda. Con el empate ambos combinados se relajaron y los locales dieron entrada a los menos habituales a modo de ensayo antes del final del encuentro.