Samuel hunde al Betis y levanta al Málaga

Sobre el césped malagueño se vio atisbos de la reacción que necesita el Betis en un inicio de campaña que comienza a ser preocupante. Preocupa la coraje en sus jugadores. Esta vez, los de Mel sí mostraron empuje y ganas, aunque fueron reacciones a los golpes de su rival. El conjunto visitante trató de comenzar la reacción, pero el Málaga lo impidió.

Los de Schuster tampoco llegaban sobrados de alegrías. Aún así el hecho de no tener el agua al cuello permitió ver al conjunto local más alegre y convencido de lo que hacía. Por si fuera poco, los blanquiazules tomaron ventaja en el partido en la primera ocasión, un remate de Santa Cruz de cabeza ante la parsimonia de la defensa. El gol en contra sentó bien al Betis.

Dejaron atrás los miedos y empezaron a jugar al fútbol. Tampoco llegaron las ocasiones, pero el cambio de actitud trajo su premio. Verdú empataba el partido con un magistral lanzamiento de falta. El ex del Espanyol pasó a tomar las riendas y el Betis se sintió más a gusto.

Nada más comenzar la segunda mitad, Perquis caía fulminado al suelo en un choque con Fabrice y era trasladado inconsciente al hospital. Por momentos, el Betis notó que la suerte volvía a mostrarse enfadada con ellos. Y más debió pensarlo cuando se pasó del 1-2, al 2-1. Vadillo perdonó y Eliseu no. Aún así, los visitantes volvieron a meterse en el partido con un gran gol de cabeza de Jordi Figueras, a centro de Juan Carlos (2-2). A partir de ahí el duelo entró en una gran igualdad. El Betis ofreció más pero perdonó grandes ocasiones.

A pesar del desgaste el jueves por la noche ante el Levante, los de Mel parecían más enteros, pero perdonaron en contras con superioridad mal ejecutadas. Con el partido agonizando, la defensa bética se descuidó y en una serie de carambolas Samuel, recién entrado al campo, hundió al Betis y levantó al Málaga. No hay tiempo para la pena, el Benito Villamarín recibirá al Barcelona la próxima jornada.