La 'dinamita roja' se adelantó apenas superada la media hora inicial al transformar Daniel Agger un penalti cometido sobre él mismo tras una jugada de Eriksen. Tras el paso por vestuarios Morten Olsen dio entrada a hombres de refresco, entre los que se encontraba el defensor Andreas Bjelland, que logró el gol de la sentencia en una jugada a balón parado.