Según mantiene el juez, el club coruñés no recibió la autorización porque aún no se encuentra en ninguno de los tres supuestos. Es decir, que esté en riesgo de cesar su actividad, que no supere la cantidad de su próximo ingreso y que no recibiese un compromiso en firme de "no expulsión" de la competición al final de temporada por no haber pagado créditos concursales.