El COI asegura que los preparativos de Río para los Juegos Paralímpicos son "los peores" que ha visto nunca

En un foro olímpico realizado en Sídney, Coates dijo que la construcciones no se han iniciado en algunas sedes, por lo que se enfrentan a graves retrasos, y que la calidad del agua también es una preocupación a dos años del evento.

"Creo que esta es una situación peor que la de Atenas", dijo el australiano, en referencia a los preparativos para los Juegos de 2004, que estuvieron plagados de retrasos en la construcción de las sedes. "En Atenas, tratábamos con el gobierno y algunos responsables de la ciudad. Aquí hay tres. Existe poca coordinación entre el gobierno federal, el gobierno del estado y la ciudad, que es responsable de gran parte de la construcción", agregó.

Los primeros Juegos Olímpicos que se disputarán en Sudamérica han estado plagados de retrasos, crecientes gastos y una mala comunicación entre los diferentes niveles del gobierno de Brasil y los organizadores, lo que ha provocado críticas de las federaciones deportivas internacionales.

Los organizadores del evento no respondieron de inmediato, pero el alcalde de Rio, Eduardo Paes, dijo que la ciudad "debe aceptar las críticas y trabajar duro". "Tenemos que trabajar con fervor y dedicación para entregar todo a tiempo", agregó según lo citó el sitio de noticias G1.

El ministro de Deportes de Brasil, quien es objeto de duras críticas por los caóticos preparativos para el Mundial, que se jugará hasta el 13 de julio, también se rehusó a hacer comentarios sobre los dichos del COI.

MEDIDAS DEL COI

El COI anunció una serie de medidas a principios de este mes para poner en marcha los preparativos rezagados, incluyendo el trabajo de supervisores adicionales y el envío a la ciudad de encargados de proyecto y de equipos de expertos.

"El COI ha formado un grupo de trabajo especial para tratar de acelerar los preparativos, pero la situación es grave", dijo Coates previamente en un comunicado emitido por el Comité Olímpico Australiano.

Brasil ha estado en el centro de atención por la preocupación que existe sobre los preparativos para el Mundial de fútbol que se inicia en junio. En medio de los problemas con la construcción de estadios, conflictos laborales y preocupaciones de seguridad, miles de soldados fueron desplegados en febrero en las favelas de Río de Janeiro para controlar a las bandas delictivas.

Coates explicó además que aunque los organizadores de Río se han jactado de contar con la misma cantidad de trabajadores que los que tenía Londres dos años antes de los Juegos 2012, el personal que realiza trabajos en Brasil carece de experiencia.