España necesita el 'tie break' para imponerse a Dinamarca

Con un parcial de salida de 6-1, la primera manga únicamente tuvo un contendiente a la altura, España. Las acciones ofensivas de Ibán Pérez, la dirección de juego de Guillermo Hernán y la eficacia de Jorge Fernández desde el centro del equipo, fueron las tablas a las que se agarraron sus compañeros para adjudicarse con autoridad el primer acto (25-18).

Más complicadas pusieron las cosas los daneses en el segundo set, donde los escandinavos echaron mano del arrojo y la determinación para igualar el choque, como así harían (23-25). Los nórdicos estuvieron más inspirados que los ibéricos, quienes en la recta final del set tuvieron un par de imprecisiones que les imposibilitaron forzar el empate.

Comenzaba un nuevo partido en que los dos equipos parecían más preocupados de defenderse de las acometidas rivales que de sumar puntos. Entre el nerviosismo fue Dinamarca el que mejor se movió, sacando 'tajada' del atenazamiento general de la anotación española. Con cuatro arriba desde la mitad del set, los daneses no pasaron mayor apuro para 'guardar la ropa' y ponerse por delante (20-25).

Cuando peor estaban las cosas para los españoles, la reacción del público fue determinante, llevando en 'volandas' al conjunto de Fernando Muñoz, que comenzó a creer en sus posibilidades en un cuarto asalto donde los locales pasaron literalmente por encima de su oponente adjudicándose con autoridad el set (25-14).

En el 'tie break' definitivo España echó mano de su mayor experiencia para llevar el ritmo del partido. Con sus errores en mínimos, los españoles fueron poco a poco yéndose en el electrónico, ante la mirada impávida de los daneses, que se frotaban los ojos viendo cómo perdían un set (15-11) y un encuentro que habían tenido en su mano. Un remate de Sergio Noda fue el broche de oro para una noche mágica de la selección española de voleibol que de este modo se mantiene líder del grupo A.