Nueve años después de que Noelia de Mingo asesinara a tres personas e hiriera a otras siete en la Fundación Jiménez Díaz, el juez ha decretado su salida en libertad durante 30 días como medida terapeútica. Durante este periodo, De Mingo no tendrá vigilancia policial y quedará bajo la supervisión de su familia, que deberá controlar que tome el tratamiento.