Este martes los acusados del matar, supuestamente, al guardia urbana de Barcelona han ido hasta la casa donde se cometió el crimen, para reconstruir lo que ocurrió el día del crimen. Los sospechosos han llegado hasta la escena del crimen en coches policiales diferentes, de los que se ha bajado primero la mujer de la victima, y tras ella el supuesto amante de la chica.