El juez ha ordenado el ingreso en prisión a 6 de los 7 detenidos por la mortal paliza a un joven de 17 años en San Sebastián. Dos de los presuntos agresores son de origen magrebí, otros tres de nacionalidad rumana y otros dos son españoles. La madre de Santi, el joven asesinado por este grupo de jóvenes que le pidió un cigarro, pide que se deje a un lado el odio: "Mi propuesta es que nos enfoquemos en el amor, que conservemos mucha paz y tranquilidad. Que dejemos a un lado la rabia, las discriminaciones racistas y el odio".
