Una vez más el fútbol amateur vuelve a ser noticia por la violencia. El pasado fin de semana, un aficionado y la madre de un jugador protagonizaron un nueva pelea en un partido entre el Logroñés y el Valle del Ebro. El presidente de este último fue uno de los únicos que intentó calmar la situación y pidió ayuda para parar la pelea. Borja Jiménez alerta de una situación insostenible que se repite cada fin de semana y de la que responsabiliza a los padres.