El patrimonio de la duquesa de Alba

Antes de repartir su herencia, la duquesa de Alba empezó a deshacerse de algunos de sus bienes. En 2008, doña Cayetana declaró que enía 35 millones de euros en bienes aunque su patrimonio era mucho mayor. En 2010, la duquesa de Alba tiene 63 inmuebles de los que en 2013 conserva 35, lo que disminuyó su patrimonio inmobiliario. Es en el año 2011, cuando la Duquesa hace su venta de activos más importante al desprenderse de de acciones, casas y otros enseres por valor de más de 40 millones de euros. En ese mismo año, en 2011, sus hijos se reparten la herencia de 207 millones de euros, 172 millones más de lo declarado en 2008. Tras el reparto, las cuentas de la Duquesa pasan de cinco millones a 1,2 millones, de los que entregó 120.000 euros en efectivo a Alfonso Díez. Tras esto, la Duquesa le avala para que le concendan un préstamo de 174.000 euros para que adquiera la casa de Sanlúcar de Barrameda. De lo que nunca se desprende la Duquesa es del Palacio de las Dueñas, donde vivió hasta su muerte. Además, la Duquesa dejó a sus hijos viviendas y locales en Madrid, un edificio anexo al Palacio de Liria y una casa en Marbella. Durante los últimos años se fue desprendiendo de muchas cosas pero ¿qué hacía cuando necesitaba efectivo? En 2013, la Duquesa subastó parte del mobiliario de un baño, lo que le reportó un beneficio de cinco millones de euros.