Las doulas son una figura muy críticada dentro del sector sanitario. Se trata de mujeres sin formación médica que asisten a embarazadas y les dan consejos sobre como cuidar a sus hijos recien nacidos. Entre estas polémicas indicaciones destacan la autoingesta de la placenta, no cortar el cordón umbilical o tener extremo cuidado con los ginecólogos. Cobran en torno a 1200 euros y son defendidas por algunos sectores de la población que abogan por los partos naturales.