Según ha revelado el chófer del trabajador de la Junta de Andalucía, recibió 450.000 euros para crear una granja de pollos que nunca se puso en marcha. En su declaración, el chófer ha asegurado que el dinero se gastó en fiestas y otra serie de gastos que no tenían nada que ver con la ejecución del proyecto para el que se había concedido la sobvención.