Después de un juzgado de Aranjuez permitiera que un hombre visitara a su hija después de haber matado a la madre de la menor, la Audiencia Provincial rectifica esta sentencia. Según el nuevo auto, los encuentros de la menor con su padre y con sus abuelos paternos pueden desestabilizar a la pequeña, que se está adaptando a vivir en un entorno diferente al que vivía antes de la muerte violenta de su madre.