El informe anula de la ONG 'Transparencia Internacional' deja a España en el puesto número 30 de países más corruptos, empadada con Botsuana. Estos datos coinciden con los ofrecidos por la Fiscalía General del Estado que ha revelado que en 2011 España aumentó en prevaricación un 30%, en cohecho un 45%, en tráfico de influencias 44% y los casos de malversación de caudales públicos aumentaron un 25%.