En las diligencias del caso, la Policía describe cómo es el sótano donde se cometió la presunta agresión sexual y la situación en la que se encontraba la víctima de la presunta agresión sexual en grupo. Tras la entrada en el garaje, los agente se encuentran con un sótano dividido en dos salas con restos de bebida y a una chica, ya vestida y arropada por la familia de uno de los acusados.