Violada, estrangulada y quemada, a esta joven ucraniana aún la quedaron fuerzas para grabar un video contando su calvario y denunciar a sus tres agresores. Los tres jóvenes la dieron por muerta y sus tres agresores, dos de ellos hijos de funcionarios con importantes vínculos politicos, fueron detenidos y puestos en libertas. Gracias a la presión popular, han sido metidos en prisión.