José Bretón seguía enamorado de su mujer y así se lo manifestó a su mujer en una carta que le entregó el día anterior a la desaparición de los pequeños en un parque de Córdoba. Acompañada de un ramo de flores, José Bretón hace llegar a su mujer una carta de amor y de arrepentimiento. José Bretón le pide a su mujer una segunda oportunidad, quiere retomar su relación y está dispuesto a cambiar todo aquello que Ruth desee.