Ocho años después de la desaparición de Madeleine McCann, la policía británica tiene un nuevo sospechoso. Se trata de un hombre de 32 años llamado Silvio y que en mayo de 2007 todo apunta a que estaba en el Algarve portugués. Las alarmas han saltado tras ver las imágenes de Silvio, que ha confesado el asesinato de dos menores, llevándose a un menor bosnio el pasado 1 de octubre aprovechando la llegada masiva de inmigrantes a Berlín.