Dos cachalotes pigmeos mueren en A Coruña tras ingerir plástico
Se trata de una hembra de cachalote pigmeo y su cría
Apenas se registra un avistamiento de esta especie al año en Galicia
Durante la pandemia, la contaminación por plástico se ha multiplicado
La contaminación de nuestros mares deja víctimas con demasiada frecuencia. Las últimas, dos cachalotes pigmeos que han aparecido varados en Malpica (A Coruña). La hembra ingirió un vaso de plástico y su cría no fue capaz de sobrevivir pese a los esfuerzos de los voluntarios. Lo más curioso de todo es que ni siquiera se tenía constancia de la presencia de esta especie misteriosa en aguas gallegas.
Poco se sabe de los cachalotes pigmeos (Kogia breviceps). Lo cierto es que todo cuanto se averigua suele ser después de producirse varamientos como este, puesto que no se dejan ver con facilidad en el mar. Al año, apenas se consigue registrar un avistamiento de esta especie en el entorno de Galicia, asegura la organización sin ánimo de lucro CEMMA (Coordinadora para el estudio de los mamíferos marinos).
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“La sorpresa fue que aparecieron otros dos individuos en Malpica (A Coruña). Una hembra adulta muerta y su cría viva. Afortunadamente la persona que los descubrió es voluntario de CEMMA, Jose Manuel Pérez, y la rápida alerta permitió poner en marcha un dispositivo coordinado con el ayuntamiento de Malpica para la atención a la cría. Hicieron cuanto pudieron mientras se desplazaba hasta allí una de nuestras Unidades Móviles, pero acabó falleciendo”, ha publicado en Facebook.
Durante la necropsia de la madre se comprobó la presencia de un vaso plástico en el estómago que había causado lesiones en la pared, continúa explicando. Ante la ausencia de ninguna otra evidencia o problema observable a simple vista, y a la espera del análisis histopatológico, esas lesiones y las consecuentes molestias pudieron haber sido la causa del varamiento.
El plástico en los océanos, la otra pandemia
El problema que se viene observando en cachalotes y zifios se va agravando a medida que los océanos se llenan de plástico. Lo hemos visto en los últimos años no solo en el norte, también en el Cabo de Palos, en el Mediterráneo, y de igual manera se sabe que está perjudicando a las aves marinas.
Redes de pesca, bolsas, sacos de rafia, bidones… “Si no se toman medidas, para el 2050 existirán cerca de 12.000 millones de toneladas de desechos plásticos repartidos en vertederos y en el océano”, ha alertado en más de una ocasión la Organización de las Naciones Unidas. Durante la pandemia, además, “la contaminación por plástico y otros materiales desechables se está disparando”, advierte.