Nos inspiramos en las vips: cinco modos de anudarte la bufanda con estilazo invernal

Con media vuelta, con una vuelta completa, a modo de corbata, anudada o reliada, parece mentira lo mucho que puede dar de sí. Nos fijamos en cinco vips para aprender a llevar esta prenda que, a pesar la escasez de tejido, puede dar mucho juego y ayudarte no sólo a no pasar frío sino a levantar tu estilismo.

A modo de corbata, un clásico masculino

La forma de llevar la bufanda de Carla Bruni y Nicky Hilton se ha convertido en la manera típica en que se la ponen los hombres y no sólo porque queda como una corbata, también porque resulta cómoda de colocar y no se mueve de su sitio. Para llevarla de esta manera basta con doblar la prenda por la mitad y meter los dos cabos que quedan sueltos por el hueco del doblez. Así de sencillo y de práctico, especialmente si la bufanda no es muy gruesa ni excesivamente larga.

Media vuelta, para darle movimiento

Así la llevan las que saben cómo jugar con ella y quienes, como Kate Moss o Bella Hadid, las usan para esconderse tapándose media cara. Te dará mucho juego porque puedes abrigarte hasta la nariz, darle holgura en el cuello o dejarla completamente abierta en un momento según vaya cambiando la temperatura: al entrar en un local, al doblar una esquina o si de repente sale el sol.

Con un nudo, para mayor seguridad

Una manera tradicional de llevar colocada la bufanda es dejando ambos cabos sueltos hacia adelante y realizando un nudo en el centro del cuello, como Heidi Klum. Para llevarla de este modo es imprescindible que la bufanda no sea muy gruesa, de lo contrario te quedará un nudo con excesivamente voluminoso y poco favorecedor.

Con una vuelta completa, a la manera tradicional

Es un clásico, pero tiene su punto. Puedes optar por llevar los cabos completamente simétricos, como Rosie Huntington Whiteley, o dejar uno de ellos más largo que el otro, como la lleva Lena Headey. Esta manera de colocarte la bufanda es perfecta para las de tejidos de lana gruesa y para las más largas, porque si no tiene suficiente longitud estará moviéndose continuamente de su sitio.

Reliada, para el frío de verdad

El modo más calentito de colocarte la bufanda es como la lleva Marta Hazas, completamente enrollada. El único secreto consiste en cogerla de un extremo, liarla al cuello y esconder el cabo suelto al terminar. Tiene como ventaja que es la manera más abrigadita de usarla, aunque también tiene un pero: cada vez que tengas que quitártela y ponértela te lo vas a pensar dos veces.