Jordi es uno de los jóvenes que encadenan trabajos mal pagados. Muchos jóvenes deciden volver a estudiar después de experimentar estas experiencias laborales tan precarias. Más de la mitad de los jóvenes barceloneses aceptaría trabajos mal pagados y casi la mitad lo haría sin contrato. Esta perspectiva hace que muchos jóvenes dejen sus estudios por desmotivación.