Ocho años depués salen a la luz las reconstrucciones del caso Marta del Castillo
Fue la primera versión de Miguel Carcaño . En ella Miguel describió cómo tras una discusión le golpeó a Marta en la cabeza con un cenicero. Durante la reconstrucción Miguel se mostró titubeante pero lo contó varias veces y lo representó delante del juez en la vivienda de Leon XIII donde habían sucedido los hechos. Aunque Miguel sería condenado por este golpe de cenicero, el juez tenía dudas. Había detalles que no cuadraban como el hecho de que marta no se golpeara al caer con ningún mueble u objeto, a pesar de la estrechez de la habitación. En este relato Miguel no implicó a su hermano Francisco Javier pero el Cuco sí lo hizo al día siguiente cuando le tocó el turno. El menor explicó que llegó después cuando Miguel llamó a Samuel para que le ayudara. Los dos acudieron con un vehículo y sacaron el cuerpo de Marta sin tapar. Luego lo llevaron al río Guadalquivir. El Cuco explicó que el hermano de Miguel le amenazó con hacer daño a su familia sino mantenía la boca cerrada y ayudaba. Por eso Miguel se vengaría días después del Cuco con una nueva versión. Acaban de encontrar el ADN del menor en la habitación donde Miguel situó la escena del crimen. Y aunque el menor había dicho que no entró en esa habitación porque cuando llegó con Samuel, el cuerpo de Marta estaba en el salón. El Cuco había tenido que ir a declarar por segunda vez y esa vez, asesorado por el abogado, lo había negado todo. Pero Miguel volvió al juzgado y acusó a su amigo el Cuco de violar y estrangular a Marta. Esa segunda reconstrucción que hizo Miguel y a la que ha tenido también acceso Informativos Telecinco, estaba plagada de lagunas y contradicciones. El juez Francisco de Asís Molina se lo hizo ver a Carcaño que contestaba con argumentos sin sentido. Según él, su amigo había amenazado a Marta, y a él, con una navaja, y agredió sexualmente a Marta con una mano porque en la otra llevaba la navaja. Después la maniató con cinta aislante, sin soltar la navaja. Finalmente la estranguló con un cable alargador. Mientras, Miguel miraba sin intentar detenerle. El juez no le creyó, se notaba, pero tras meses de instrucción decidió juzgar a Carcaño por violación y al menor de edad lo procesaron por lo mismo en un juzgado de menores. Durante esos meses de investigación Miguel dio siete versiones distintas y lo peor, cuatro lugares diferentes donde habrían depositado el cuerpo de Marta que ocho años después sigue buscando la policía.