Sony abandona las pérdidas y gana 226 millones de euros en el primer trimestre

Hace un año, la multinacional nipona había perdido 37.100 millones de yenes (326 millones de euros) en ese mismo trimestre.

La mejora en los resultados del fabricante de las pantallas Bravia, la PlayStation y los ordenadores Vaio se debe sobre todo a la aplicación de un plan de reducción de costes y al aumento de sus ventas, especialmente en la división de televisores, que le han permitido revisar al alza sus previsiones anuales.

Ello a pesar de la apreciación del yen frente al euro y el dólar, cuyo tipo de cambio en ese período superó en un 13,5% y un 5,8%, respectivamente, al registrado en abril-junio de 2009.

Entre abril y junio de 2010, además, Sony tuvo un beneficio operativo de 67.000 millones de yenes (590 millones de euros), frente a las pérdidas por actividad ordinaria de 25.700 millones de yenes (226 millones de euros) del mismo trimestre del año anterior.

Sus ventas mejoraron también en el período reportado, al suponer 1,66 billones de yenes (14.621 millones de euros) frente a los 1,59 billones de yenes (14.080 millones de euros) de hace un año, un incremento del 3,8%.

Por ello, Sony revisó hoy al alza sus previsiones de beneficio para el año fiscal 2010, que concluirá en marzo de 2011, a pesar de que espera que persista la apreciación del yen frente al euro en el actual ejercicio.

Sony pronosticó que tendrá un beneficio neto anual de 60.000 millones de yenes (528 millones de euros), un 20% más de lo que preveía en mayo pasado y frente a las pérdidas de 40.800 millones de yenes (358 millones de euros) del ejercicio anterior.

A la vez, revisó al alza su cálculo de beneficio operativo anual hasta los 180.000 millones de yenes (1.583 millones de euros), un 13% más que en su anterior pronóstico del 13 de mayo.

En el ejercicio fiscal 2009 Sony había alcanzado un beneficio operativo o por actividad ordinaria de 31.800 millones de yenes (279 millones de euros).

No obstante, Sony mantuvo hoy su anterior previsión en cuanto a las ventas anuales, que espera supongan 7,6 billones de yenes (66.782 millones de euros), un 5% más que en el ejercicio anterior.

La multinacional japonesa sumará así otro ejercicio de mejora en sus resultados tras haber presentado en el año fiscal 2008 los peores números de su historia, con pérdidas millonarias tanto en el apartado neto como el operativo.