Bernardo Atxaga: "Estoy orgulloso de mi inconsciencia y mi entusiasmo"
CRISTINA GONZÁLEZ SÁNCHEZ
01/04/200913:28 h.A los 30 años dejó todo tipo de trabajo para dedicarse a escribir y su apuesta le ha llevado al éxito de vivir de la literatura. Bernardo Atxaga se siente orgulloso de su apuesta. "No tuve seguridad social hasta los 40 años ni casa ni nada hasta los 43 años. Yo aposté y, al final, he conseguido que mis libros se traduzcan. Estoy orgulloso de mi inconsciencia y de mi entusiasmo", cuenta el escritor que ahora presenta 'Siete casas en Francia. Esta nueva novela es la fórmula elegida por Atxaga para expresar "la ambición, la codicia y también la estupidez de quien se pone un objetivo absurdo e innecesario para intentar influir sobre otros". En este caso, un ente que escribe desde Europa e impide volver al capitán Lalande Birán hasta que tenga siete casas, relata Atxaga. No sólo de la obsesión por conseguir este objetivo habla la novela.
"Quería escribir sobre cosas tan horribles como el mal, la insensibilidad, la muerte... No en forma de crónica, ni como denuncia. Quería que fuera una novela de aventura. Elegí África porque todos la tenemos en la cabeza desde Tarzán o Chita hasta exploradores como Livingstone. No habla sobre el Congo Belga. Habla de la vida y el mundo", cuenta en escritor durante su encuentro con los lectores de Informativos Telecinco.
El autor más leído en euskera explica que antes de darse cuenta "escribía en esa lengua" y se convirtió en su "lengua íntima. La lengua de mis cuadernos. Es algo lógico para una persona como yo: hijo de maestra". Explica que antes de empezar esta novela ha podido tomar 100 páginas de notas. "Es importante que cuando mueves a los personajes sea por un lugar real. Se trata de una acumulación, de almacenar cosas hasta reventar y al comenzar a escribir llega la precipitación".
Leopoldo II de Bélgica, hoy
La novela se ambienta en el Congo belga gobernado por Leopoldo II de Bélgica. Los lectores querían saber qué personaje sería hoy Leopoldo de Bélgica a lo que es autor vasco. "Conan Doyle y Mark Twain vieron que Leopoldo de Bélgica era una alimaña. Ellos mismos explicaron que 'cuando vaya al infierno, que espero que sea pronto, los habitantes de allí se horrorizarán de verle'. El mal se personificaba en él. Eso hoy en día se produce exactamente igual. Hay un crimen terrible, pero las víctimas no están en la representación". Atxaga explica que Bush ha puesto las cosas fáciles para buscar este personaje pero "hoy día es difícil identificar el mal, personificarlo y buscar responsabilidades" para el escritor.
"Patxi López puede ser un buen lehendakari"
Sobre el cambio político que se está produciendo en el País Vasco, Atxaga es claro. "Patxi López puede ser un buen lehendakari. Aunque, el gobierno actual va a tener muchos problemas porque el resto de los partidos tiene más apoyo. La yunta es extraña. Si el buey derecho frena al izquierdo va a ser un desastre. Se va a perder mucho tiempo", explica el autor de 'Siete casas en Francia'. Atxaga se confiesa amante de los términos medios y, por ello, ha apoyado públicamente a Ezker Batua. Sobre la política, advierte sobre el peligro de las palabras. "Hay que tener cuidado con las palabras".
Es inevitable hablar de terrorismo con un escritor vasco. Bernardo Atxaga siente como 'dramática' la realidad de Euskadi. "Con 13 años, estaba en mi escuela y a tres kilómetros Etxebarrieta mató a Pardines. Esto marca una biografía. Cuando pienso en mis hijas lo que más deseo es que sea una biografía diferente", cuenta el autor de 'Obabakoak'.
La denuncia a través del silencio
Atxaga dice tener "un concepto muy modesto de la felicidad" y avanza que su próxima obra será la biografía de un boxeador que siempre le ha obsesionado. "El personaje es abismal. Pero no voy a contar como pensaba antes. Llevo tanto tiempo tras él, que el tema no es él, sino mi persecución. Va a ser un autoanálisis", relata. 'Siete casas en Francia' llega a las librerías para hacer las delicias de sus incondicionales. Bernardo Atxaga anuncia que el lector "se reirá y, momentos después, se parará a pensar por qué se ríe de esto si es terrible. He enfocado la sátira con el silencio. Donde tendría que haber denuncia, no la hay".