El discurso de la premiada Dolors Miquel no gustó nada a los populares. La oración poetica se coló en el debate político del Consistorio y el líder del PP, Alberto Fernández Díaz, calificó el gesto de 'falta de respeto'. Ahora el PP pide el cese del responsable que permitió el padre nuestro sexual. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha defendido a la poetisa y a la libertad de expresión.