Kesha presenta en Barcelona y Madrid su nuevo álbum, "Animal + Cannibal"

La cantante de Los Ángeles actuará en la sala Razzmatazz de Barcelona mañana sábado con todas las entradas agotadas, y al día siguiente en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid, compitiendo con Lady Gaga, que ofrece el mismo día en la capital su "Monster Ball Tour".

Catapultada al estrellato gracias al tema "Tik Tok", con el que consiguió vender dos millones de discos de su álbum debut, "Animal", Ke$ha -al que algunos apodan "la salvaje del pop"- se caracteriza por rapear en bases pop y electrónicas.

Ke$ha ha conseguido parte de su éxito gracias a una estudiada estética, a medio camino entre lo 'punk' y lo 'fashion', con el pelo desaliñado, mucho maquillaje, purpurina y 'pearcing' en la nariz.

Ganadora del premio a la Mejor Artista Revelación en los últimos MTV Europe Music Awards, la artista empezó a sonar a mediados de 2009 tras participar en el sencillo número uno del grupo Flo Rida, "Right Round".

Con "Animal", lanzado en enero de 2010, Ke$ha adquirió una enorme popularidad al debutar en el número uno del Billboard 200 y colocar el primer sencillo, "Tik Tok", en lo más alto de las listas de once países.

En marzo, "Animal", que incluye otros conocidos temas como "Take it off" o "Blah Blah Blah", llevaba vendidas un millón de copias en todo el mundo y sus canciones acumulaban ocho millones de descargas.

Con "Cannibal", un EP que cuenta con ocho temas inéditos y un 'remix', Ke$ha ha regresado este otoño al número uno de las listas de éxitos en Estados Unidos gracias a "We R Who We R".

Esta pieza de dance pop, que algunos afirman que será el nuevo himno del orgullo gay, reflexiona acerca de los últimos suicidios en Estados Unidos de jóvenes homosexuales por 'bullying'.

Canciones como "Sleazy", "Blow", "The Harold Song", "Crazy Beautiful Life" o "Grow a Pear", en las que también participa Ke$ha como letrista, forman parte de "Cannibal".

El fulgurante éxito de esta artista no ha estado exento de polémica; mientras algunos críticos afirman que abusa de la modulación de voz (el 'autotune') en sus canciones y han criticado su capacidad como letrista, otros alaban el espíritu divertido y festivo de sus composiciones.