Mández de Vigo despide a Venancio Blanco: "Nos enseñó repensar el concepto de taller como el lugar donde se sueña"

"Nos enseñó repensar el concepto de taller como el lugar donde se sueña y se proyectan los sueños artísticos, a trabajar con ilusión durante toda una carrera profesional, a entender el arte como una búsqueda constante de la belleza a través de todas las múltiples temáticas que enriquecen su obra, o a redescubrir la escultura religiosa en su última etapa artística", ha señalado.

Para el ministro, su historia es la de "una vida entera dedicada a la búsqueda de la belleza", según ha declarado Méndez de Vigo, quien ha dicho que Venancio Blanco ha sido "querido en toda España", reconocido también "fuera de las fronteras". "Venancio Blanco nos deja la compañía de dos cosas que no vamos a olvidar nunca: su obra y su ejemplo", ha agregado.

Venancio Blanco, que inició su carrera a mediados del siglo pasado, fue nombrado Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en 1975, director de la Academia Española de Bellas Artes en Roma en 1981 y Miembro Correspondiente de la Pontificia Insigne Academia Artística dei Virtuosi al Pantheom en 1986.

El Premio Nacional de Escultura en 1959, la Primera Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes en 1960, el Gran Premio de Escultura en la V Bienal de Arte de Alejandría en 1963, la Medalla de Oro en la IV Bienal de Arte Sacro de Salzburgo o el Premio Castilla y León de las Artes en 2001 son algunos de los numerosos galardones que ha recibido a lo largo de su carrera.