La felicidad de los ganadores de los Premios Tony se vio empañada ayer por el dolor causado por la masacre de Orlando. Algunos de los artistas expresaron su dolor luciendo lazos de color plateados, otros aprovecharon sus discursos para condenar este tipo de ataques homófobos e incluso, en el caso de Lin-Manuel Miranda, retiró todas las armas que aparecían en la pieza musical que interpretaron durante la ceremonia a modo de reivindicación