Más de 10.000 personas asisten al único concierto de Sabina este año en España, que le reunió en Gredos con Calamaro

Joaquín Sabina ofreció un concierto de casi dos horas y cuarto en la Sierra de Gredos, el único este año en España, junto a Andrés Calamaro, con más de 10.000 espectadores, ante los que llegaron a tocar dos temas juntos, 'Todavía una canción de amor', compuesto a medidas entre ambos, y 'Princesa'.

En la sexta edición de 'Músicos en la Naturaleza' --organizado por la Fundación del Patrimonio Natural--, ambos mostraron sus preferencias por Bob Dylan, que tocó en el mismo escenario en 2008, pues si el de Úbeda había manifestado días antes que besaría por donde hubiera pasado el autor de 'Like Rolling Stone', el argentino lo dejó escrito en el libro de visitas de la Casa del Parque situada a la entrada del recinto.

Con su banda habitual, donde se encuentran Pacho Varona y García de Diego, y con las voces y coreografía de Mara Barros, Sabina interpretó una veintena de canciones de las últimas décadas, desde 'Esta noche contigo', y 'Tiramisú de limón', con las que comenzó, a 'Tan joven y tan viejo', 'Noche bodas', 'Y nos dieron las diez', 'Contigo', 'El pirata cojo' y 'Pastillas para no soñar', con las que terminó.

Entre medias Calamaro salió al escenario para hacer dos temas con Sabina, recordando viejos tiempos como la gira de 1994 con Los Rodríguez en Argentina.

Sabina, que dedicó una canción a la modelo Arancha de Benito, aludió a su reciente enfermedad, diverticulitis aguda, que motivó que suspendiera su gira por Estados Unidos: "la verdad es que no era nada diver y daba mucho por culitis".

Antes, Calamaro, con un calamar en el micrófono, ofreció durante hora y cuarto algunas canciones de su amplio repertorio, destacando las de su disco aparecido en abril 'Salmonalipsis now', y terminando con 'Flaca'.

El cantante dijo entre canciones apoyar al presidente de la SGAE: "estoy con Teddy" (Bautista) y criticó las detenciones al decir que "los autores están con los huesos en la cárcel".