La alta velocidad vuelve al carril

La alta velocidad tiene un nuevo reto, conectar las líneas de alta velocidad entre sí y, en algunos tramos, con la vía convencional. La próxima puesta en funcionamiento del túnel, recién terminado, que une las estaciones de Atocha y Chamartín lo hará posible. Conectará las líneas del norte y noroeste, con las del sur y Levante; de manera que un viajero pueda llegar desde Asturias hasta Valencia sin interrupciones. Pero la crisis le ha pasado factura a la alta velocidad, con retrasos por falta de presupuesto y porque ha habido que rescindir contratos por la quiebra de algunas constructoras. De manera que obras de gran complejidad y que cambian por completo el territorio, afectando a sus habitantes, se han ralentizado. Once tramos están ahora mismo en ejecución.