El BBVA mejora sus expectativas para la economía pero no para el desempleo

El último informe "Situación España" de BBVA Research, pronostica un retroceso de la economía del 0,2% en 2010, una décima menos de lo previsto por el Gobierno, en tanto que para el próximo ejercicio espera un crecimiento del 0,9%, frente al 1,3% estimado por el Ejecutivo.

De acuerdo con la entidad, hasta el segundo o tercer trimestre del año que viene no comenzará a crearse empleo, pero será tan débil que no permitirá reducir la tasa de paro, que prevé que suba hasta el 20,6% como consecuencia del incremento de la población activa.

Dicha estimación es 1,3 puntos porcentuales superior a la del Gobierno (19,3%) y cinco décimas más alta que la máxima alcanzada en el segundo trimestre de este año (20,09%).

Para el economista jefe de BBVA Research, Rafael Doménech, el año que viene será el de la finalización del proceso de destrucción de empleo, pero no el de su recuperación, ya que la creación de puestos de trabajo no será tan elevada como para que la tasa de desempleo caiga de manera significativa.

En su opinión, avanzar y consolidar las reformas puestas en marcha por el Gobierno, entre ellas la del mercado de trabajo, será la clave para mejorar las expectativas de crecimiento.

De momento, según la entidad, el mercado laboral continúa ajustándose al ritmo marcado durante los últimos trimestres, sin que se haya producido un deterioro adicional en el tercer trimestre como consecuencia de la caída de la demanda interna (consumo público y privado e inversión).

El informe descarta que en el tercer trimestre se haya producido una recaída de la economía, gracias a que se han relajado las tensiones financieras, han aumentado las exportaciones y el consumo privado no ha caído tanto como se podía esperar con el proceso de ajuste fiscal ya iniciado.

"Estamos mejor de lo que esperábamos", aseguró Doménech, quien, no obstante, advirtió de que aún existen incertidumbres y de que el PIB estimado para el próximo año sigue siendo reducido y será insuficiente para generar empleo.

El informe hace hincapié en que, al contrario de lo que prevé el Ejecutivo, el consumo de lo hogares será insuficiente para sostener en 2011 el crecimiento económico, que se apoyará sobre todo en la aportación del sector exterior.

En este sentido, señala que todavía no ha concluido el proceso de reducción del endeudamiento de los hogares y empresas, por lo que cree que no cabe esperar una aceleración sustancial del gasto doméstico privado.

A ello añade que el repunte de los tipos de interés de los depósitos a plazo podría seguir estimulando el ahorro privado del conjunto de la economía en detrimento del consumo.

Por otra parte, la entidad augura que el Estado cumplirá su compromiso de reducir el déficit del conjunto de las administraciones al 9,3% del PIB este año y al 6% en 2011, y que incluso lo logrará con cierta holgura, aunque es "crucial" que las comunidades autónomas sean rigurosas con el ajuste fiscal.

Por ello urge a las comunidades autónomas a que ofrezcan "más y mejor" información periódica sobre su ejecución presupuestaria para poder obtener en los mercados financiación para su deuda.

Según dice, si no se hace un mayor esfuerzo de transparencia, las dudas de los inversores sobre la capacidad de las autonomías para recortar el déficit seguirán siendo una "barrera importante" para la reapertura efectiva de los mercados mayoristas, sobre todo a nivel internacional.

En su informe la entidad hace un análisis del grado de transparencia de las cuentas públicas autonómicas, según el cual sólo seis comunidades ofrecen una información completa y mensual, igual a la que proporciona la Administración General del Estado.

El análisis, que no concreta de qué comunidades está hablando, destaca que otras tres autonomías ofrecen información completa trimestral y tres más dan algún tipo de datos, en tanto que las cinco restantes no proporcionan información alguna.