Desahuciada porque su marido se jugó la casa a las cartas

El marido de Paquita se jugó la casa a las cartas hace 29 años, pidió un préstamo y se fugó dejando una deuda de 3.000 euros, pero ella no lo supo hasta hace cinco años, cuando el prestamista vino a reclamarle los 90.000 euros en los que se había convertido el préstamo. Paquita se gana la vida poniendo cafés en un pequeño bar que montó en su domicilio y no puede pagarlo. Ha sido desahuciada junto a su hijo, la pareja y los dos hijos que tienen ellos. Se quedan sin techo y, de momento, les va a acoger en su casa una hermana de ella.