Economía admite que hay que vigilar el alza de las importaciones tras el aumento del déficit comercial

En declaraciones a los medios tras la presentación del libro 'España en la inversión directa internacional' en la CEOE, García-Legaz ha dicho que, a pesar del incremento, el dato de los nueve primeros meses del año es "positivo" porque revela una recuperación de las exportaciones.

En concreto, ha subrayado que las ventas de mercancías al exterior crecieron un 1,9% en tasa interanual hasta septiembre, lo que supone un incremento mayor que en otros meses del año. "Es una buena noticia", ha dicho.

Además, ha asegurado que el incremento de las importaciones no tiene una lectura "tan negativa" porque, en buena parte, se debe al repunte de las compras de bienes de equipo, que están permitiendo mejorar la competitividad de la industria española.

"Con todo, el dato merece una valoración razonablemente positiva, puesto que España ha sido el país en el que más han crecido la exportación en el mes de septiembre", ha señalado.

De cara al cierre del año, García-Legaz ha reconocido que España acabará el ejercicio con un déficit comercial algo más alto que el de 2013, el menor de la historia, aunque con la segunda cifra más baja en los últimos 40 años.

Los servicios, por su parte, se están comportando muy bien y lo seguirán haciendo en lo que queda de año, lo que permitirá acabar el 2014 con un nuevo superávit en la balanza de pagos a pesar del déficit comercial.

Sobre los destinos de las exportaciones españolas, García-Legaz ha reconocido que están cayendo las ventas a los países emergentes, que han registrado "un crecimiento tremendo" en los últimos años, pero no están recuperándose de las caídas posteriores.

Sin embargo, ha asegurado que otras áreas, como EE.UU. o algunos países asiáticos, están compensando el descenso de las exportaciones a América Latina, y ha recordado que el porcentaje de las exportaciones fuera de la UE se ha elevado al 37% desde el 25% registrado hace cuatro años.

A su parecer, lo que hay que hacer es perseverar en las ventas fuera de la UE, que es donde se concentrará el crecimiento mundial a medio y largo plazo. Aún así, ha considerado que las empresas españolas deben estar orgullosas porque hace cuatro años había unas 100.000 empresas exportando y ahora hay unas 151.000.