El Gobierno veta las enmiendas a los PGE contra la congelación de las pensiones

El Ejecutivo se ha acogido a la facultad que le reserva el Reglamento del Congreso para impedir que se voten enmiendas a los Presupuestos que supongan un incremento de gasto o una disminución de ingresos. Precisamente, con la suspensión de la revalorización automática de las pensiones se buscaba un ahorro de 1.500 millones de euros.

El Gobierno ya recurrió al veto en el debate presupuestario de hace un año para evitar que la oposición le 'tumbara' la subida del IVA que ha entrado en vigor en julio. Los socialistas han tomado esta decisión aunque contaban con el apoyo de PNV y Coalición Canaria, que hasta ahora votaban contra la congelación de pensiones y que han variado su estrategia tras la firma de sus acuerdos de estabilidad económica con el PSOE.

El PP recurre en el Congreso

El Grupo Popular presentará "de inmediato" una queja formal a la Mesa del Congreso de los Diputados por el veto del Gobierno. Sin embargo, el PP no piensa detener su acción con la queja a la Mesa del Congreso, y no descarta llevar el caso hasta el Tribunal Constitucional, sumando este asunto al recurso que ya está preparando con motivo del veto, hace un mes y medio, a una proposición de ley del PP que pedía precisamente la derogación de las pensiones, según señalaron a Europa Press en fuentes 'populares'.

En rueda de prensa, el coordinador económico del PP, Cristóbal Montoro, y el portavoz 'popular' de Presupuestos, Vicente Martínez Pujalte, expresaron su rechazo a la decisión del Ejecutivo, comunicada al Congreso cuando el debate en Comisión del proyecto de ley ya se había iniciado, y han asegurado que "no les convence" el argumento del Gobierno de que tenía derecho a pedir estas tramitación.

El letrado de la Comisión, a preguntas del PP durante la reunión de la Mesa para valorar la decisión del Gobierno, ha asegurado que el Gobierno tiene quince días -la mitad en un procedimiento de urgencia- para decidir si se opone o no a la tramitación de una iniciativa parlamentaria por suponer un aumento de gastos o una minoración de ingresos.

Martínez Pujalte ha asegurado que no se puede anteponer el "derecho positivo" al derecho de los grupos parlamentarios a ejercer su tarea de oposición, ya que la decisión del Gobierno se ha conocido cuando ya habían transcurrido varias horas del debate en la Comisión, con lo cual la práctica totalidad de las enmiendas vetadas ya habían sido discutidas y, además, estaban justificadas.

"El Gobierno socialista con tal de mantener la congelación de pensiones no duda en violenta las reglas elementales de nuestra democracia y de menoscabar los derechos de nuestro parlamento", ha remarcado Montoro, para quien el veto es una "maniobra" que no oculta que los Presupuestos para 2011 son los más "antisociales" de los últimos años. CGS