LAB ve posible un pacto Bildu-PSE para acometer una reforma fiscal, aunque da "muy poca credibilidad" a los socialistas

La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, ve posible que Bildu y PSE puedan lograr "acuerdos políticos" para poder acometer una reforma fiscal, aunque da "muy poca credibilidad" a los socialistas porque han tenido la oportunidad de tomar medidas desde el Ejecutivo vasco y "no han hecho absolutamente nada".

En una rueda de prensa en San Sebastián, Etxaide, acompañada del secretario general adjunto y de la secretaria de Política Social del sindicato, Jabi Garnika y Bea Martxueta, respectivamente, ha anunciado que LAB presentará en su próxima Asamblea Nacional, el 22 de septiembre, sus retos y líneas de trabajo prioritarias.

Además, ha censurado la "escandalosa" coyuntura actual y las medidas que se están adoptando para afrontarla, con un sistema financiero que "especula con deuda pública y hace lo que le da la gana", mientras los gobiernos "son incapaces de controlar la situación".

A su juicio, "o se sitúa el debate en la financiación, en el capítulo de ingresos, y por tanto en la política fiscal" o en el futuro se va a "profundizar" en la crisis económica. Etxaide ha opinado que es "posible" y "necesario" que se alcance un pacto para acometer una "contrarreforma a la reforma fiscal llevada a cabo en los últimos años".

"Es posible y necesario que haya ese pacto y puede ser que Bildu y PSE sean sujetos para construirlo pero le damos muy poca credibilidad a las palabras del lehendakari, Patxi López, y a la voluntad política real del PSOE de abordar de forma real y efectiva medidas en la política fiscal, porque han tenido la oportunidad, han sido el Gobierno en Gazteiz y no han hecho absolutamente nada", ha censurado.

Por ello ha apuntado que los socialistas "no tienen ninguna credibilidad" en esta cuestión, puesto que "no han sido capaces de tomar ni una sola medida" fiscal para mejorar los ingresos, mientras ahora están "reivindicando eso como uno de los pilares básicos de una política de cara a las próximas elecciones". "Queremos ver voluntad política de cambiar las cosas y que se articulan debates y mecanismos" para ello, ha señalado.

En este sentido, ha insistido en que Bildu y PSE pueden ser "sujeto a acuerdos políticos" en materia fiscal, aunque ve "más probable acuerdos políticos en el sentido contrario", es decir, para "hacer modificaciones fiscales para que nada se modifique". Según la secretaria general de LAB, los socialistas "ganarían mucha credibilidad si hicieran una cosa que pueden hacer sin reformar mucho la legislación, luchar contra el fraude fiscal".

Tras calificar la coyuntura actual de "altamente complicada", no se ha mostrado esperanzada en que el próximo año se pueda experimentar un crecimiento de la economía, ya que las políticas que se están adoptando para superar la crisis son "totalmente ultraneoliberales" y no están logrando más que "profundizar" en la actual coyuntura.

Etxaide ha censurado que en los últimos tres años los gobiernos han estado desviando recursos públicos al sistema financiero, "desviando riqueza mediante recortes de derechos laborales y sociales al sistema financiero", mientras éste "ha seguido con su práctica, especulando ahora, con todo el dinero público que se están quedando, con deuda pública".

REFORMA CONSTITUCIONAL

En este sentido, ha criticado el "pacto de Estado" alcanzado para acometer la reforma constitucional para contener el déficit, con la que se busca "hacer que sea mandato constitucional priorizar el pago de la deuda pública y sus intereses sobre el derecho a la sanidad, a la salud y a unos servicios públicos dignos, priorizar el sistema financiero ante un modelo social que hasta ahora era inviable", lo cual es "mentira".

"Lo que nos están diciendo ahora es que está prohibido acentuar las políticas para incrementar ese modelo social", mientras se "perpetúan" las políticas que se han venido acometiendo en los próximos años, ha indicado, para añadir que se trata de hacer "de obligado cumplimiento" el dar dinero público al sistema financiero "por encima de todo".

Por tanto, ha considerado que da igual a qué partido político se elija para gobernar el Estado, porque va a estar "atado" a las actuales políticas, por lo que "no hay disputa de proyectos políticos", sino que lo que está en juego es "quién va a gestionar el mandato constitucional de seguir profundizando en este proyecto".

A su juicio, los gobiernos son "los únicos responsables de que la crisis esté empeorando y que, en un futuro, sea más dificultoso hacer otro tipo de políticas que es lo que necesitamos", y todo ello sobre "la gran mentira de que no hay alternativa".

ELECCIONES GENERALES

Por otro lado, en este contexto, ha valorado "muy positivamente", la unión de fuerzas "de izquierdas y abertzales", en alusión a la concurrencia conjunta de Bildu y Aralar en las próximas elecciones generales del 20 de noviembre, para priorizar "sobre intereses partidistas la necesidad de, en este momento tan importante, hacer una defensa de los derechos de Euskal Herria".

Etxaide ha insistido en que, en un momento en el que "se está cuestionando el modelo territorial y social", actuar "como pueblo" y tener un ámbito político que "prioriza esa actuación ante sus intereses particulares" es "algo a valorar positivamente y a recalcar".

Además, ha realizado un llamamiento a Bildu y Aralar a que "hagan suya la necesidad de defender la capacidad que tiene que tener Euskal Herria para decidir sus propias políticas económicas y sociales", y la reivindicación de la construcción de un marco vasco de relaciones laborales y sociales porque "es necesario" y "urgente" dotarse de instrumentos "reales" para poder generar y construir la alternativa a la actual situación.