Morgan Stanley advierte de que los problemas de Grecia en el medio plazo no están resultados

Morgan Stanley cree que si los partidos helenos que apoyan el rescate logran formar un gobierno de coalición, la probabilidad de que Grecia salga del euro en el corto plazo se reduciría, pero advierte de que el problema en el medio plazo no está resuelto, ya que la solvencia del país en el medio plazo "no está garantizada" y podría resurgir la amenaza de un default o una salida de la unión monetaria.

"Aunque el 'Drachmageddon' podría haberse evitado por ahora, existe todavía el riesgo latente de que podría ocurrir en el futuro. Por este riesgo latente, algún daño al euro, pensamos, podría incluso ser permanente", señalan los analistas de la entidad.

En concreto, la entidad cree que la solvencia de la economía griega está lejos de estar garantizada, pese a que el nuevo rescate situará al país en una senda de deuda más sostenible en el medio plazo. Así, señala que aunque consiga reducir su deuda al 120% del PIB (el banco prevé un 140%), sigue muy por encima del umbral del 90% que considera sostenible para un país en su situación.

En un informe sobre los resultados de las elecciones helenas, señala que la "inevitable" realidad es que Grecia va a necesitar financiación, y si la financiación no procede del mercado, tendrá que venir de los acreedores oficiales.

Además, advierte de que una vez que Grecia se acerque un presupuesto primario equilibrado en un año, el incentivo para intentar renegociar el programa del rescate podría ser mayor, lo que elevaría de nuevo la amenaza de un default o incluso la posibilidad de que Grecia abandone el euro.

Así cree que el país podría escoger un default de su deuda doméstica, en vez de alargar el doloroso ajuste de su economía, si el coste de esto último excede el coste del primero, y añade que lo mismo se puede aplicar a la duda entre opciones más suaves (renegociar los términos) o más duras (intentar una salida del euro).

La entidad cree que si surge un Gobierno en Grecia que tenga la voluntad de cooperar con sus socios europeos, la probabilidad de una salida de Grecia del euro en el corto plazo, que antes situaban en un 35% para los próximos 12-18 meses, disminuirá, independientemente de si el Gobierno puede cumplir con las condiciones acordadas.

MEJORA DEL PROGRAMA GRIEGO.

En su opinión, esto se debe a que Europa puede al menos decir que Grecia ha "vuelto al camino", quizás con un programa ligeramente diferente, dado que se espera una mayor recesión, y así los políticos griegos pueden presentar en cierto modo una senda de ajuste más suave a los ciudadanos.

Los analistas de Morgan Stanley cree que los tipos de interés de los préstamos es probable que desciendan más y se amplíe el periodo de devolución. En concreto, estiman que los pagos anuales de intereses de los préstamos a los países de la eurozona se podría reducir de medio en los próximos años en hasta 5.000 millones de euros.

"En cierto sentido, esto es una forma leve de participación del sector oficial y es probable que dé a Grecia un respiro mejorando su servicio de la deuda y, en cierta medida, sus perspectivas de sostenibilidad. Ajustes similares ya sucedieron con los dos paquetes de rescate", añaden.

Asimismo, también ven posible que se aprueben algunas medidas para fomentar el crecimiento, pero descartan que cambie radicalmente la senda fiscal. Así, creen que aunque se dé al país mas tiempo para cumplir sus objetivos de déficit o se reduzcan, los principales aspectos exigidos para sanear las cuentas y hacer reformas estructurales se mantendrán.