Renfe perdió 209 millones en 2014, pese a elevar un 4,7% los ingresos por tráfico de viajeros

Los resultados de la operadora pública se vieron afectados por el aumento del 22,2% del canon que paga a Adif por el uso de las vías, de las estaciones y del resto de infraestructuras ferroviarias, que supuso un total de 607,4 millones de euros.

Las cuentas de Renfe de 2014 también recogen el impacto de gastos financieros por 146 millones, de los relacionados con el proyecto del AVE La Meca-Medina, que se multiplicaron por seis y sumaron 21,7 millones, y por la dotación de 29,7 millones realizada para atender el expediente de regulación de empleo (ERE) voluntario y universal que aplicó la compañía el pasado año.

Los ingresos totales de Renfe crecieron un 5,7% el pasado año y sumaron 2.966,5 millones de euros, mientras que los gastos se incrementaron un 7%, hasta 2.751 millones de euros.

El beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía pública, que previsiblemente a comienzos de 2016 afrontará la entrada de competencia en tráfico de viajeros, se situó en 214,6 millones a cierre de 2014, lo que implica un descenso del 9,3% en comparación al ejercicio anterior.

En el capítulo de ingresos, destaca el aumento del 4,7% de la facturación por tráfico de viajeros, que se situó en 1.939 millones de euros, impulsada por los récords de pasajeros que el servicio Alta Velocidad y Larga Distancia viene registrando desde que hace dos años la compañía bajó el precio de los billetes. Por su parte, el transporte de mercancías en tren generó 248,9 millones de euros, un 12,5% más.

Renfe recibió el pasado año una compensación pública de 607 millones de euros para costear las circulaciones de media distancia convencional (regionales) que presta por obligación de servicio público, para garantizar determinadas conexiones de interés social.

Del lado de los gastos, además de los referidos al canon de Adif y al AVE a La Meca, destaca el aumento del 4% en gastos en energía. Por contra, la compañía recortó un 1,8% el gasto de personal y un 8,6% el correspondiente a los servicios a bordo de los trenes.

PÉRDIDAS DE RENFE VIAJEROS.

En cuanto a las sociedades filiales en las que Renfe se reestructuró en enero de 2014 para diferenciar sus distintos negocios y prepararse para la competencia, todas ellas concluyeron en 'números rojos'.

Así, Renfe Viajeros cerró el pasado año con una pérdida de 149,5 millones de euros, afectada por el referido canon a Adif y los gastos financieros, y a pesar del aumento del 4,8% de los ingresos.

Renfe Mercancías registró una pérdida de 53,9 millones, un 28% inferior a la de 2013, mientras que la rama industrial y de talleres, Renfe Fabricación y Mantenimiento, perdió 3,36 millones, tras reducir casi a la mitad (-44%) los ingresos por mantenimiento y reparación de trenes, hasta 316 millones.