Valeriano Gómez cree que la moderación salarial será necesaria en lustros

Durante un acto organizado por la consultora KPMG sobre "El nuevo marco de las relaciones laborales", Gómez afirmó que la negociación colectiva es el "arma fundamental".

La moderación salarial será "clave" para restaurar la competitividad en opinión del ministro, quien auguró que en días o en semanas, como máximo, la patronal y los sindicatos llegarán a un acuerdo e insistió en que, si no fuera así, el Gobierno llevará un proyecto de ley al Parlamento.

Gómez dijo que en España "nadie nos tiene que enseñar" cómo se deben ligar los salarios y la productividad.

En este sentido, advirtió de que si los salarios suben por encima de la productividad, acaban con la empresa y con la "economía en su conjunto".

Según Gómez, "hay que construir" un esquema de determinación salarial que tenga en cuenta el coste de la vida y que sirva para eliminar el histórico diferencial de inflación con la Unión Europea.

El ministro explicó que ello implica que no se pueden tener salarios reales que crezcan más que en Alemania, porque supondría perder competitividad y "esto no nos puede pasar", avisó.

Respecto a la reforma laboral, dijo que el análisis no se debe centrar en el despido, porque no fue ese su objetivo, y pidió que no se valore "mes a mes", sino que sus efectos deben juzgarse con la suficiente perspectiva, cuando la economía se recupere.

A su juicio, es necesario reducir la brecha que existe entre la contratación fija y la temporal, para lo cual no es necesario que haya un "contrato único", pero sí ser "sensatos" porque el contrato temporal es siete veces más barato que el indefinido.

Respecto a las declaraciones del Gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, que ha calificado el mercado laboral español de "obsoleto e ineficiente", Gómez respondió que "no tenemos el mejor mercado laboral del mundo", aunque añadió que ahora nuestros problemas están "en el mercado financiero".

Respecto a una posible subida de tipos de interés, Gómez dijo que la economía debe tener en cuenta el conjunto de la UE y subrayó que no es partidario de un alza del precio del dinero.

Según el ministro, la economía debe tener en cuenta el conjunto de la UE porque en el pasado hubo problemas al ser demasiado "laxa" y podría volver a haberlos en el futuro si es demasiado "rígida".