En el conjunto de las actividades económicas, el número de trabajadores afectados por ERE aumentó un 44,4% en los cuatro primeros meses del año en comparación con el mismo periodo de 2011, hasta un total de 134.586 personas.
La organización sindical advirtió de que los expedientes no pactados se incrementaron un 373,7%, hasta sumar 2.738, lo que está generando un "deterioro del clima laboral con un incremento de la conflictividad social", así como un aumento de las impugnaciones de los despidos.