Tres de cada cuatro casas de alquiler de coches de Madrid incumple normativa

Según ha informado el Ayuntamiento madrileño en una nota de prensa, entre julio y septiembre nueve inspectores de Calidad y Consumo han supervisado 69 establecimientos de alquiler de coches por toda la ciudad, el 75,4 por ciento de los cuales (52 locales) incumplía la normativa de alguna manera.

Así, la mayoría de las infracciones (72,5 por ciento) responde a la utilización de cláusulas abusivas en sus contratos, "contradiciendo los principios de buena fe y justo equilibrio entre las partes". "Las cláusulas sancionables imponen un fuero jurídico para resolver los posibles conflictos que pudieran surgir sin tener en cuenta el que le corresponde al consumidor o usuario, o exoneran de cualquier tipo de responsabilidad al arrendador del vehículo en casos como el mantenimiento del coche, que es responsabilidad del arrendador", explica el Consistorio.

Además, "no penalizan los posibles retrasos en la entrega por parte de la empresa de los vehículos contratados, mientras que sí se establecen penalizaciones en el caso de devolución tardía por parte del consumidor", e incluyen leyendas semejantes a 'salvo error tipográfico'.

Respecto a las hojas de reclamaciones, el 13 por ciento no las anunciaba en el local de modo permanente y visible al público y el 10,1 por ciento ni siquiera las tenía a disposición de los consumidores. Por otro lado, el 8,7 por ciento de los locales exhibían leyendas que inducían a error, vulnerando con ello los derechos de los consumidores.

El 7,2 por ciento de los establecimientos inspeccionados tampoco entregaba justificante de la contratación efectuada y el 4,3 por ciento no ofrecía el precio final del servicio antes de contratar el servicio.

Para todas estas actuaciones en las que se ha cometido algún tipo de irregularidad se incoará el correspondiente procedimiento sancionador, tramitándose de acuerdo con la legislación que regula la materia.

ACTIVIDAD FUNDAMENTAL

El alquiler de vehículos es una actividad con incidencia tanto en madrileños como en turistas, lo que convierte a esta campaña en un "instrumento más para la buena imagen de la ciudad y sus servicios ante los cada vez más numerosos visitantes".

La campaña, que tiene como objetivo velar por el cumplimiento de la normativa a fin de que no se vulneren los derechos económicos de los ciudadanos, forma parte del programa de inspecciones 2011 y, al ser la primera vez que se realiza, los resultados de su evaluación sirven como base para establecer una imagen inicial de este tipo de establecimientos en todo aquello que se refiere a las obligaciones generales en materia de defensa de los consumidores.