Las empresas del sector del agua elevarán su negocio en el extranjero un 5% este año

La tendencia a la privatización de la gestión del agua y las notables inversiones en infraestructuras hídricas realizadas en países emergentes han incentivado en los últimos años la actividad internacional de las principales empresas españolas que operan en el sector del agua, en un contexto de atonía del mercado interior.

En concreto, las empresas españolas que actualmente desarrollan actividades de abastecimiento, saneamiento, depuración o desalación de agua en el extranjero alcanzaron en 2011 una facturación agregada en el exterior de 1.941 millones de euros, un 43% más que en el año 2008.

No obstante, según DBK, durante el pasado año se produjo una moderación del ritmo de crecimiento del negocio, el cual registró una variación del 2,5%, frente al 24,1% del ejercicio anterior, como consecuencia de la crisis económica global, los conflictos en Oriente Medio y la nacionalización de recursos en Latinoamérica.

Por áreas geográficas, el 56% de los ingresos procedió en 2011 de Centroamérica y Sudamérica, situándose a continuación Europa, con una participación del 17%, Australia (12%), África (11%) y Asia y otras zonas (4%).

Alrededor de una veintena de empresas españolas del sector del agua tienen actividad en el extranjero, ya sea en el ámbito de la construcción de instalaciones como en el de la gestión del servicio.

La principal zona de actividad en el exterior de los operadores españoles es Centroamérica y Sudamérica. En la actualidad, el 64% de ellos gestionan contratos o desarrollan proyectos de construcción en esta área, teniendo presencia en catorce países.

No obstante, la consultora señala que la política de nacionalización de los recursos naturales implantada por algunos países ha reducido el peso específico de Centroamérica y Sudamérica en el negocio exterior de las empresas españolas, mientras que, por el contrario, han aumentado su importancia los intereses en el Norte de África y Australia.

Así, actualmente el 68% de los operadores con actividad en el exterior tienen presencia en el continente africano, destacando la importancia de los proyectos desarrollados en Argelia.

Por su parte, el 59% de las empresas operan en Europa, con actividad en diez países, mientras que el 32% tiene intereses en Australia y Estados Unidos. La presencia en Asia es todavía reducida.