En el caso de España, los productores se quedaron un 2,2% por debajo de la cuota que les corresponde para entregas y también destinaron menos del límite que les correspondía para la venta directa.
Pese al exceso de los ocho países sancionados, el volumen de producción por entregas en la Unión Europea se mantuvo un 4,6 % por debajo del límite establecido. En total son 20 los Estados miembros que no han sobrepasado sus derechos de producción.