La policía francesa busca a los dos terroristas al norte de París

Parece más una imagen propia de un estado de guerra. Es la zona al norte de París tomada por miles de soldados, policías y gendarmes en la que se busca a los dos sospechosos de haber cometido el atentado de París. No hay vehículo que no se identifique, casa a la que no se llame, rincón que no se peine. Son sin duda los 20 kilómetros cuadrados más vigilados del planeta. Con el mismísimo presidente de la República, François Hollande, supervisándolo todo desde la sede central de la Gendarmería. Son 88.000 personas a la caza de dos terroristas. Lo que sí se se conoce ya es su presunta identidad: son hermanos. Said y Charif Kouachi, de 34 y 32 años. A bordo del coche en el que huyeron iría un cómplice de 18 años. Precisamente en uno de los vehículos que usaron olvidaron un documento de identidad. La policía ha detenido ya a nueve personas de su entorno. En una gasolinera próxima los dos presuntos terroristas han abandonado otro coche con diez cócteles molotov y una bandera yihadista, A varios kilómetros de allí, en el centro de París, continúa acordonada, en silencio y ensangrentada la sede de la revista Charlie Hebdo.